Una de las claves a la hora de decorar un salón rectangular es la distribución del espacio y la selección de los muebles. Existen además diferentes posibilidades a la hora de elegir las áreas que queremos crear, según las necesidades y gustos personales: la clásica salón-comedor, salón con oficina, salón biblioteca o incluso la opción de doble sala de estar.
En cualquier caso un salón de forma rectangular en el que queremos separar dos ambientes es todo un reto decorativo a la hora de diseñarlo. Por un lado, queremos evitar que quede ese efecto encajonado y saturado, y por otro necesitamos dejar espacio para poder circular en él sin problemas. Desde la elección de los muebles hasta la manera en que los distribuimos en el espacio, la decoración y la iluminación, todo cuenta.
¿Quieres aprovechar al máximo el espacio y crear dos ambientes diferenciados? Échale un vistazo a estos tips que te servirán de inspiración para distribuir y decorar un salón estrecho y convertirlo en un espacio atractivo y acogedor.
Una mesa pequeña en vertical
Cuando tenemos un salón de forma rectangular y queremos integrar el comedor en el mismo espacio el objetivo es separar correctamente los ambientes, y el principal problema con el que nos encontramos es la falta de espacio y necesidad de aprovechar cada metro. En este salón comedor, las lámparas sobre la mesa para comer ayuda a diferenciar ambas áreas. La mesa en vertical aprovecha el espacio disponible.
Elección y ubicación del sofá
El sofá es la pieza de mobiliario más grande y que más va a definir el espacio. Colocar un sofá modular en una esquina del salón rectangular te va permitir dejar libre el espacio en el centro, que se podrá aprovechar para otras piezas sin crear ese efecto abarrotado. Además va a crear pequeños huecos de almacenaje en los que colocar una lámpara de pie o una mesita auxiliar.
La televisión, colgada en la pared
Si es posible, cuelga la televisión de la pared. Esta es una buena forma de crear la distancia necesaria entre el sofá y la pantalla de TV. Ten en cuenta que un mueble de televisión o de almacenaje muy ancho puede ocupar demasiado y hacer que el salón rectangular parezca más pequeño. Los muebles de almacenaje con poca profundidad van a ser tus aliados en esta labor.
Alfombras para diferenciar ambientes
La alfombra blanca sirve para separar el área del salón del comedor en este salón rectangular. Usar el mismo color en las paredes y los muebles, como el blanco en este salón, es una buena alternativa, para que queden integrados permitiendo esa sensación de amplitud. Las lámparas colgantes a juego también se han colocado estratégicamente en cada espacio.
Cambios en la pared de textura y color
En este salón se ha utilizado una pared lisa en gris para la zona del salón (con la tv, una mesa de centro redonda y el sofá) mientras que en el comedor se usa pared en blanco con molduras. Esto permite que visualmente se separen los dos ambientes, mientras que se deja un espacio para pasar. La mesita redonda y de patas finas facilita esta tarea.
Solo los muebles necesarios
En un salón rectangular y estrecho es muy importante centrarnos en cuales son las piezas de mobiliario que utilizamos en el día a día. Utilizar muebles versátiles y ligeros, como en este salón en el que se ha prescindido de una mesa de centro, nos ayudará a no abarrotar el ambiente.
Utiliza una mesa redonda
Utilizar una mesa de comedor redonda permitirá aprovechar el espacio un poco más. En este salón se ha colocado utilizando un espacio pequeño con la forma de las paredes. Para la sillas, lo mejor es que sean lo menos abultadas posible y sin reposabrazos. También puedes hacer uso de las lámparas de techo para crear dos atmósferas diferenciadas.
¿Qué mesa de centro elegir?
Es conveniente optar por piezas ligeras, como mesas de patas estrechas y materiales como el cristal, para permitir que circule el aire entre el sofá y la televisión. Elegir piezas grandes y aparatosas pueden provocar que se sature el ambiente e impedirnos el paso. Sin embargo, las de cristal crean esa sensación de amplitud.
Las formas de la pared y elementos fijos
Puese aprovechar los huecos en la pared para aprovechar el espacio. En este salón pequeño se ha utilizado un hueco para colocar la tv en una cómoda que además sirve como almacenaje. Los elementos de obra fijos como esta chimenea ayuda a definir el espacio, siendo el foco de atención. En este caso, la pieza que separa la zona de comedor y la de estar es el sofá.
La magia de la iluminación
Las lámparas bien ubicadas tienen la capacidad de crear ambiente y hacerlo más acogedor. En este salón rectangular las lámparas de pie de papel a juego diferencian claramente la zona de lectura de la del sofá, consiguiendo dos ambientes perfectamente diferenciados en los que apetece relajarse.
Sofá chaise longue, en la pared más larga
Tiene sentido colocar la pieza de mobiliario más grande en una de las paredes más extensas, con el objetivo de aprovechar el espacio. De esta forma dejamos sitio en el centro para una mesa de centro pequeña, si es de un redonda y de cristal perfecto, para aligerar visualmente el ambiente.
Cada objeto su función
Tanto en la decoración como en los muebles que utilizamos, debemos centrarnos en su funcionalidad. Excedernos en la decoración en espacios pequeños puede hacer que los espacios se vean más pequeños. Optar por decorar con moderación, como en este salón estrecho, es una buena idea.
Diferentes tonos en el color de la pared
En este salón estrecho que incluye la cocina se ha marcado cada espacio con un color predominante muy diferenciado, el azul oscuro en la cocina, blanco en la sala de estar y un azul cielo en la parte de la terraza. Además, las piezas de mobiliario son pequeñas y versátiles, y con la decoración se ha conseguido cierta continuidad, al añadir puntos de color como el rosa salmón y el azul claro.