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El agua es un recurso limitado y cada gota cuenta. A continuación, te mostramos algunos consejos y soluciones muy fáciles para reducir el consumo de agua en casa y, por ende, bajar tu factura:
- Cierra el grifo mientras te enjabonas las manos. Si dejas el grifo abierto, puedes gastar hasta 10 litros de agua, mientras que si lo cierras, solo gastarás 1,5 litros.
- Instala grifos con limitador o reductor de caudal. Estos grifos mezclan el agua con aire y reducen el consumo hasta en un 50%.
- Coloca un aireador en el caño del grifo. Bajará el consumo de agua a la mitad y es fácil y barato.
- Utiliza la ducha en lugar de la bañera. Llenar la bañera supone un gasto de 230 litros de agua, mientras que la ducha puede gastar hasta 22 litros por minuto. Si cambias la alcachofa de la ducha por un modelo eco con limitador de caudal, reducirás el consumo hasta en un 50%.
- Espera a que el agua de la ducha salga caliente. Supone un despilfarro diario de cerca de un 20%. Las griferías termostáticas alcanzan la temperatura deseada en segundos y te permiten ahorrar y disfrutar de una ducha más agradable.
- Utiliza una papelera en lugar del inodoro. Tirar desperdicios y accionar la cisterna supone un gasto innecesario. Si además instalas una cisterna de doble descarga, podrás elegir entre consumir tres o seis litros, lo que supone un ahorro de hasta el 50%.
- Cambia el grifo de la cocina por uno con limitador de caudal o con aireador. También puedes cerrar el grifo mientras enjabonas los platos para gastar menos agua.
- Utiliza el lavavajillas en lugar de lavar los platos a mano. Supone un ahorro de hasta 31 litros de agua por cada uso. Los electrodomésticos eficientes ahorran agua y energía, y si eliges programas eco en la lavadora y el lavavajillas, puedes ahorrar hasta un 36% de agua en cada lavado.
Con estos hacks, ya no tienes excusa para no reducir tu consumo de agua. Ahorrarás dinero y, además, ayudarás a cuidar el medio ambiente. Dos por uno.
